LA ESTANCIA DE MICHELLE OBAMA

04 Ago LA ESTANCIA DE MICHELLE OBAMA

Después de cuatro intensos días de vacaciones en la Costa del Sol, la primera dama de Estados Unidos Michelle Obama y su hija Sasha partieron el pasado domingo del aeropuerto de Málaga sobre las 10.50 horas en dirección a Palma de Mallorca a bordo del Air Force Two. En el Palacio de Marivent esperaban los Reyes de España y la Princesa de Asturias. Tras el almuerzo con la Familia Real española, la mujer del presidente Barack Obama y su hija de nueve años embarcaban en el mismo avión de regreso a Estados Unidos.

Benahavís, donde se ubica el hotel en el que han estado alojadas, el Villa Padierna, un establecimiento de cinco estrellas gran lujo, operado por la cadena Ritz Carlton; Marbella; Granada; Estepona, y Ronda, fueron los lugares incluidos en la agenda vacacional de la primera dama. Así, desde el aeropuerto de Málaga, al que llegaron el pasado miércoles, junto a un grupo de amigos, se desplazaron por carretera al hotel Villa Padierna. Por la tarde pasearon por el casco antiguo de Marbella, haciendo pequeñas compras y cenando en el restaurante Buenaventura de la plaza de la Iglesia.

Granada fue el destino del segundo día de la visita de las Obama. Una intensa jornada que incluyó la Catedral; la cueva La Rocío del emblemático barrio del Sacromonte, donde disfrutaron de un espectáculo flamenco de la mano del bailaor Juan Andrés Maya y su familia, y el conjunto monumental de la Alhambra y el Generalife. Al día siguiente Michelle y Sasha disfrutaron de la playa en la Costa del Sol; en concreto, fueron al club que el hotel Villa Padierna tiene en Costalita, en Estepona. Por la tarde, la pequeña estuvo en el parque Selwo Aventura, también en esta localidad. La ciudad de Ronda fue la elegida por Michelle y Sasha para pasar el sábado. La bicentenaria plaza de toros, el Tajo, la iglesia de Santa María la Mayor, la Casa de Don Bosco, la del Rey Moro o el Puente Nuevo fueron algunos de los monumentos más emblemáticos que visitaron. Finalmente, la mujer del presidente de Estados Unidos decidió para su última noche cenar con tres amigas en el restaurante La Meridiana del Albardero en Marbella.

Beneficios para el turismo
El concejal de Turismo de Marbella, José Luis Hernández, ha hecho un balance «muy satisfactorio» del paso de la primera dama de EEUU y su hija por esta ciudad, que a su juicio refleja «la culminación de un proceso que hace tres años hubiera sido impensable». «Hemos sido capaces de revertir una mala situación y reforzar con vigor la marca de Marbella y su imagen internacional», ha afirmado el edil. Por su parte, el alcalde de Benahavís, José Antonio Mena, ha manifestado que esta visita ha sido «un acontecimiento importantísimo que va a beneficiar al turismo, lo que redundará en una mayor afluencia de visitantes y potenciará el mercado internacional».
«A partir de ahora debemos seguir en la misma línea de fomentar y apoyar incluso con recursos económicos la apuesta hacia este mercado que había dejado de venir», según Mena, que ha cifrado en un cuarenta por ciento el descenso de turistas americanos en los últimos años. Mena ha afirmado que «desde hace unas semanas los operadores americanos han empezado a interesarse de forma especial en los municipios de Benahavís y Marbella».

La visita ha generado un impacto publicitario de casi 20 millones de euros
La visita de la primera dama estadounidense y de su hija a Andalucía ha tenido una cobertura de 1.423 noticias en los medios de comunicación y un valor económico de 19.307.937 euros, según un informe elaborado por la empresa Kantar Media. Cualquier agente interesado en promocionar este evento, tendría que invertir esos 19,3 millones de euros en publicidad para conseguir la misma repercusión en los medios de comunicación.
El informe de Kantar Media analiza la repercusión y la valoración en euros en prensa, radio y televisión del «efecto Michelle».

Fotos www.fredytorra.com