30 Abr EL DR. HERNÁN CORTÉS-FUNES PROTAGONISTA DE CENAS CON CHISPITAS
Cenas con Chispitas, una iniciativa promovida por Chispitas Media y que consiste en la reunión de un grupo selecto de comensales alrededor de una buena mesa, un ponente y un tema concreto para debatir, reunió a unos veinte comensales en el restaurante 1870. En esta cita el ponente era el prestigioso Dr. Hernán Cortés-Funes, director de la Unidad de Oncología de HC Marbella. El tema no podía ser otro que una pregunta que nos hacemos en múltiples ocasiones: “¿Hasta cuándo el cáncer?
En un lenguaje sencillo y que todos los asistentes pudiesen entender, el oncólogo explicó los avances que se han producido en los últimos años. Muchos de ellos se centran en el diagnóstico precoz, gracias a nuevas pruebas y a la tecnología, que permiten que la esperanza de los pacientes sea mucho mayor al detectar el cáncer en su fase inicial. HC Marbella se caracteriza por contar con la aparatología más innovadora para la detección y seguimiento del cáncer. Fue el primer centro hospitalario de la provincia en contar con un PET. Pero además cuenta con Plataformas Genómicas gracias a las que se puede estudiar en profundidad los genes del paciente y las posibles alteraciones. También habló de los nuevos tratamientos que vienen a complementar otros tradicionales como la radioterapia o la quimioterapia. Nuevos fármacos que aplicados de una manera personalizada y según las necesidades del paciente aumentan en un alto porcentaje las probabilidades de curación como la Inmunoterapia y la terapia dirigida. Destacó que el futuro de los tratamientos pasa por la Oncología de precisión.
El Dr. Hernán Cortés-Funes recordó que el cáncer es algo que ha acompañado a la humanidad desde hace miles de años y que incluso aparece en momias del Antiguo Egipto. Sin embargo, lanzó un mensaje de esperanza, y aunque aseguró que él no ve inmediato el final de la enfermedad, sí que cada día se producen nuevos avances que contribuyen a controlar la enfermedad y que cada vez haya mayor índice de supervivencia.
Si el doctor fue el encargado de instruir a los asistentes en el tema, el chef Aitor Perurena fue el responsable de ponerle sabor al encuentro.
La cena consistió en aperitivos servidos de manera individual: Bombón de buey y tartufata, cigala crujiente y cebiche con ají amarillo. Como entrante se sirvió el famoso dueto de canelón de hongos y su cremoso y canelón de centollo con su infusión perfumada de carabineros. De plato principal los asistentes disfrutaron de carrilladas ibéricas al teriyaki, puré de apio nabo y coles braseadas.
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